
"Mi" casa, quedaba en la zona 4 de Londres en Gant Hills, está un poco alejado el centro. En tube, deben ser unos 35, 40 minutos. Cada mañana caminaba unas 15 cuadras para llegar a la estación de subte y tomar la central line que me llevaba hasta la estación Holborn, en pleno Covent Garden para ir a la escuela... una vez ahí ya me movía para todos lados.

La dueña de casa, Barbara, una elegante english woman, siempre fue muy amable y cariñosa conmigo, destruyendo así todo mito que tenía contra los ingleses, ya que me encariñe mucho con ella y nunca fue fría conmigo, todo lo contrario, me cuido y mimo para que no extrañara tanto; al igual que a Debo, a quien también recibió muy afectuosamente todas las veces que fue a pasar el día o dormir en la casa. La verdad fue un placer encontrar un anfitrión así. Además cocinaba como los dioses y por las mañanas me dejaba un desayuno espectacular. Si ella no hubiese sido asi conmigo, el viaje se podría haber complicado, pero me hizo sentir tan cómoda, que sentí a Londres un poquito mi ciudad y el último día, sentí una angustia en el pecho por tener que irme.
Me encantaría volver a verla!
Barbara, tenía a su mascota Alfie,
un hermoso caniche toy negro que fue
la alegria el hogar. Lo extraño! Alfie era un miembro mas de la casa. Barbara lo adora y es como un hijo para ella. Alfie tiene ropa, juguetes, una cama en cada habitación de la casa y hasta le hacen comida especial para ocasiones especiales!! Es muy jugueton e inteligente. Tener a Alfie hizo que no extrañara tanto a mis pechis, por suerte.
.Hay días, que desearía despertar en Gant Hill. Ojala descubrieran la teletransportación!
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